En el nuevo drama biográfico Maestro, el actor Bradley Cooper da vida a Leonard Bernstein, considerado por muchos como uno de los conductores musicales más importantes de su tiempo. La cinta se enfoca en la relación entre el reconocido compositor y pianista, y su esposa la actriz Felicia Montenegro – interpretada por Carey Mulligan. En adición a protagonizar el filme, Cooper también sirve de director, escritor y productor. La nueva propuesta de Netflix también cuenta con los actores Matt Bomer, Maya Hawke y Sarah Silverman.

Con Maestro, Cooper confirma al público y la industria, lo que demostró con su ópera prima A Star is Born en 2018: que es una fuerza a tener en cuenta frente y detrás de la cámara. Su nueva película no tan solo es una de las mejores ofertas del año, sino que también será una de las favoritas durante el competitivo camino hacia los premios Oscar. Maestro resulta en un hermoso biopic musical, elegantemente elaborado.

Las interpretaciones en Maestro son excepcionales. Cooper (Silver Linings Playbook, The Hangover) está sensacional como Bernstein en múltiples momentos de su vida. Ya sea a sus 25 años o 70 años, Cooper se transforma por completo en el músico, logrando canalizar su esencia en todo momento. Asistido de un genial trabajo de maquillaje y peinado, el actor redondea su interpretación con excelente acento, expresiones faciales y movimientos corporales – especialmente durante los momentos en el que Bernstein conduce y/o crea música. Mientras tanto, Carey Mulligan (Promising Young Woman, She Said) no se queda atrás con su interpretación de Felicia Montealegre. La actriz se va del tu al tu con Cooper en todo momento, logrando plasmar en la pantalla grande una relación que se siente real, vivida y sincera. Mulligan brilla grandemente en las escenas donde vemos a Montealegre mantener sus emociones internamente, y luego en las escenas donde el matrimonio discute calurosamente, y Mulligan desata su furia y decepción sobre Bernstein. Ambos actores deben estar en la conversación para ganar el Oscar en las categorías de mejor actor y actriz – en especial Cooper.

Otro de los grandes aciertos del filme es la producción entera, de arriba a abajo. Siguiendo la línea de A Star is Born, Cooper se asegura en plasmar en la pantalla grande lo mejor de los diferentes departamentos a su disposición. Desde el impresionante trabajo de maquillaje y peinado hasta la hermosa música clásica seleccionada, y desde la increíble labor de vestimenta hasta el espectacular diseño de producción, Maestro no escatima a la hora de presentación.

Cabe mencionar que Maestro no sigue la línea tradicional de un biopic hollywoodense. Cooper astutamente decide por brincar a lo largo de la línea del tiempo y presentar la relación de Bernstein y Montealegre en diferentes momentos claves. Esto hace que la cinta no se sienta genérica y que las cosas se mantengan frescas e interesantes para el espectador. En adición, Cooper juega con la realidad y la fantasía dentro de la estructura, movida que le añade dinamismo y energía a los procedimientos – toque que va de la mano con el estilo de vida que Bernstein llevaba y su relación con los musicales y Broadway.

Por último, debo mencionar que la cinta incluye uno de los mejores momentos cinematográficos del 2023. Cooper magistralmente recrea la actuación legendaria de Bernstein liderando la Sinfonía de la Resurrección de Mahler en la Catedral de Ely, Inglaterra, en 1973. La secuencia pone en exhibición el talento de Cooper frente y detrás de la cámara. El espíritu de Bernstein se apodera completamente del actor, mientras que la cámara sigilosamente captura el genio y talento del maestro conductor. Dicha secuencia probablemente le conseguirá a Cooper el premio Oscar.