Su logo compuesto de los famosos arcos dorados es reconocido en cualquier esquina del planeta. Sus papas fritas también. Hoy día, la cadena de restaurantes de comida rápida, McDonald’s le sirve a aproximadamente 68 millones de clientes diariamente. Su menú, compuesto por hamburguesas, papas fritas, desayuno, refrescos, batidas, helados, postres y ensaladas, es servido en más de 36 mil establecimientos. Y todo esto comenzó en el 1940 con dos hermanos.

El nuevo filme The Founder, del cineasta John Lee Hancock, es un drama biográfico que nos presenta la historia de Ray Kroc, un vendedor que convirtió el restaurante innovador de comida rápida McDonald’s en uno de los negocios de restaurantes más grandes del mundo con una combinación de ambición, persistencia y crueldad.

Lo bueno…

El elemento más brillante del largometraje lo es Michael Keaton (Batman, Birdman) y su interpretación del vendedor persistente Ray Kroc. Su trabajo aquí es de lo mejor de su carrera, manteniéndonos envueltos e interesados en un personaje que no necesariamente merece nuestra empatía al final del día. Keaton se luce inyectándole energía y entusiasmo a los procedimientos. Sin él, el filme no funciona. Así de simple. También cabe mencionar el buen trabajo logrado por los actores Nick Offerman y John Carroll Lynch, quienes interpretan a los hermanos McDonald. Las interacciones entre ellos y Keaton componen la mayoría de las mejores escenas del filme.

Donde el director John Lee Hancock (The Blind Side, Saving Mr. Banks) se luce es en presentarnos los comienzo detrás de la cocina del concepto de comida rápida. El diseño de producción y trabajo de vestuario es buenísimo, transportándonos fácilmente a esa época. Ver la maquinaria de cómo comenzó la idea principal y se fue desarrollando poco a poco es sumamente interesante y entretenido. El director se luce en las secuencias en donde muestra a Kroc visitando los diferentes restaurantes para supervisar que todo este corriendo como él quiere.

Lo malo…

El fallo más grande de The Founder es el trabajo desbalanceado que su director y guionista Robert D. Siegel presentan en cuestión del tono general. Desde el principio, los creadores quieren que uno apoye al personaje principal de Kroc, como un tipo de underdog. Pero luego esta dinámica cambia y se siente incomoda cuando las fichas caen en la mesa. ¿Nuestro héroe es realmente una buena persona? ¿Hemos estado apoyando a quién realmente debimos de apoyar? Esto también se aplica al tipo de mensaje que la cinta quiere conllevar al final de todo. El final apunta a un “pues, así es la vida.” Un punto no muy conmovedor. El filme se siente como un The Social Network peleándose con un The Wolf of Wall Street, sin tener un ganador claro al final.

En fin…

Por la mayor parte, The Founder es un satisfactorio drama biográfico sobre los comienzos de la cadena de McDonald’s. El filme resulta en una interesante exploración de una fascinante historia tras bastidores. Aunque corre con problemas de tono y sin tener claro que tipo de mensaje desea transmitir al final de todo, el filme sí logra salir a flote gracias a la excelente actuación de Michael Keaton en su centro.

The Founder estrena mañana jueves, 9 de marzo en Fine Arts.