Con el estreno esta semana de la secuela de Aquaman, el universo cinematográfico extendido de DC Comics (DCEU) llega a su fin. Una de las piezas grandes del ambicioso proyecto fue el cineasta Zack Snyder, quien lideró el comienzo de dicho universo con su primera entrega Man of Steel (2013). Snyder luego dirigió Batman V Superman (2016) y Justice League (2021) para DC y Warner Bros. Pictures, antes de dejar la franquicia atrás y comenzar una nueva colaboración con Netflix.
Ahora, con su nueva película Rebel Moon – Part One: A Child of Fire, Snyder da comienzo a su nuevo universo de ciencia ficción y fantasía, uno que siempre había querido lograr. Incluso, el director originalmente le presentó a Lucasfilm su idea, para desarrollar como proyecto de Star Wars. Varios años más tarde, la primera parte del rompecabezas espacial debuta en Netflix esta semana, y Part Two: The Scargiver se estrenará en abril de 2024.
Además de su trabajo con DC, Snyder es mejor conocido por dirigir filmes como 300, Watchmen, Army of the Dead, Sucker Punch y Dawn of the Dead. El autor del famoso “Snyder Cut” también ha servido de productor en cintas como Wonder Woman, Aquaman y Suicide Squad. Y a principios de su carrera, logró videos musicales para Rod Stewart, Soul Asylum y ZZ Top.
Part One: A Child of Fire narra la historia de un extraño misterioso que intenta formar un equipo de guerreros para ayudar y defender a una colonia agrícola pacífica al borde de una luna distante de las garras de los ejércitos de una fuerza gobernante tiránica. La cinta es protagonizada por Sofia Boutella, Charlie Hunnam, Ed Skrein, Djimon Hounsou y Anthony Hopkins.
CineXpress recientemente tuvo una conversación con Snyder, quien dio detalles sobre su experiencia organizando su visión para el universo de Rebel Moon, los diferentes clásicos que sirvieron como inspiración y la emoción por compartir ambas cintas con la audiencia.
Rebel Moon llevaba mucho tiempo en su mente, y el camino ha sido largo. ¿Cómo se siente al saber que la audiencia está a punto de poder disfrutar su nuevo proyecto?
Estoy realmente súper emocionado. Cuando normalmente termino una película como esta, las entrevistas y/o el estreno, me voy de vacaciones y me relajo. Pero estoy trabajando duro en la segunda película ahora mismo. Ya casi hemos terminado. Entonces, estoy emocionado de que tengamos esta película, que te lanza bastante duro a la segunda película. Estoy emocionado de que la tengamos lista para ti. Estoy emocionado de que los fans tengan la experiencia de conocer este mundo y luego, cuando crean que ya han tenido suficiente, tengan otra experiencia que los sumerja más y más en él. El último “quién eres” al final de las dos películas, con suerte, has pasado por una transformación al igual que nuestros personajes.
En el pasado, estuvo muy involucrado en la creación y desarrollo del universo extendido de DC Comics en la pantalla grande. ¿Esa experiencia lo preparó y ayudó a la hora de sentarse a crear y mapear este nuevo universo de Rebel Moon para Netflix?
Sí, eso creo. El tener mi propia propiedad intelectual, mi propio tipo de canon, que diseño y por el que vivo y muero, ya sabes, estoy bien con esas reglas y con esos riesgos. Entonces sí, absolutamente. Mi experiencia con la Justice League y con la trilogía realmente me ayudó a comprender la escala mitológica con la que iba a tener que lidiar en esta película.
Rebel Moon evoca mucho de clásicos como Star Wars, Seven Samurai, Lord of the Rings y The Matrix. ¿Cuán divertido fue rendir tributo e inspirarte de filmes tan icónicos? ¿Siempre fue parte del plan?
Sí, supongo. La tesis para mí fue tener este tipo de ambiente de fantasía de ciencia ficción retro como diseño y como especie de estética. Entonces, creo que terminas con esta relación hacia esas películas debido a ese tipo de escuela de diseño retro en la que vivíamos. Así que sí, fue muy divertido. Y mucho de eso fue interesante, porque siempre terminábamos en estos lugares sin mucho esfuerzo por parte de todos, debido a que todos teníamos la misma referencia y el mismo tipo de punto de vista. Fue una experiencia muy orgánica y para nada forzada. Esa parte fue muy divertida.