El actor australiano Hugh Jackman es la persona que por más tiempo en la historia del séptimo arte, ha interpretado a un superhéroe y/o personaje que proviene de los cómics. Su racha de darle vida al popular personaje de Wolverine, que comenzó con X-Men del 2000, ya va por 17 años. Lamentablemente, su impresionante tenencia llega a su fin cuando por novena y última vez se ponga las famosas garras de adamantio en el nuevo filme de 20th Century Fox, Logan.
La tercera entrega de la trilogía de Wolverine se desarrolla en el 2029, donde un cansado Logan se preocupa por un enfermo profesor X, cerca de la frontera mexicana. Pero con la aparición repentina de un joven mutante perseguido por fuerzas oscuras, el mismo debe decidir sí seguir huyendo de su pasado o tomar acción y liderar el camino.
Lo bueno…
Logan es la película de Wolverine que siempre había querido ver. Donde nuestro héroe se encuentra al natural y por completo en su elemento. Donde la violencia y la furia siempre lo persiguen, no importe a donde corra o se esconda. Salvaje y peligroso, pero cansado y casi rendido. El cineasta James Mangold (The Wolverine, 3:10 to Yuma) básicamente nos entrega no tan solo la mejor película de Wolverine, sino que también la mejor película de los X-Men – la versión “The Dark Knight” de este universo cinemático. Parte western, parte horror, parte road trip y parte drama, Mangold se luce inmensamente con una tremenda dirección, acertando el tono perfecto para una última salida de Wolverine.
En cuestión de las actuaciones, el elenco completo es sensacional. Hugh Jackman (The Prestige, Les Misérables) da la mejor interpretación de Wolverine hasta el momento, y una de las mejores de su carrera. Además de proyectar el desgaste físico y cansancio emocional del héroe, Jackman logra encontrar nuevas capas y mantener al personaje fresco e interesante, a pesar de que ya lo ha interpretado por casí dos décadas. Por el otro lado, Patrick Stewart (Green Room, Star Trek) se roba el filme como Charles Xavier. Stewart nos entrega a un trágico, deteriorado y cómico Profesor X – como nunca lo hemos visto. La joven actriz Dafne Keen es una revelación como X-23. La misma se convierte en una estrella antes nuestros ojos, con simplemente su mirada y gestos físicos. La química entre estos tres actores es tan buena, logrando elevar el peso emocional de tal manera, que te dejara con ganas de ver más de ellos juntos, y posiblemente te hagan soltar algunas lagrimas.
La acción en Logan es fácilmente la mejor acción en cualquier filme X-Men. Desde que comienza el filme Mangold usa la acción para establecer su tono. La película incluye secuencias de persecución, combate uno contra uno, tiroteos y mucho más. Mi favorita encuentra a Logan arrastrándose mientras el resto de las personas en un hotel están paralizadas, para llegar a un Profesor X teniendo un ataque por culpa de su enfermedad y los villanos.
Otro elemento positivo que resalta lo es la banda sonora de Marco Beltrami (Hell Boy, Scream). Aquí el músico juega con diferentes tipos de géneros dentro de su composición. En una escena dramática apuesta al piano y cuerdas, cuando de repente apuesta a sonidos experimentales y raros al aparecer un personaje inesperado que exude horror en la pantalla grande. Durante el clímax, su música apuesta a una baile de percusión que intensifica lo que ocurre dentro de un inmenso bosque.
Hay que darle gracias al filme Deadpool por abrir la puerta hacia una calificación R, al igual que al estudio 20th Century Fox de tener las agallas y tomarse el riesgo de darle riendas sueltas al director para poder ejecutar su visión para esta entrega. Aquí la violencia y lenguaje soez entran de manera orgánica, sirviendo a la historia y al personaje salvaje de Logan y X-23.
Lo malo…
Aunque la batalla final termina siendo poderosa y más que satisfactoria, estaría mintiéndoles si no admito que me quedé con las ganas de una última y épica pelea (mano a mano) para que nuestro héroe finalizara esta historia. Este sentimiento no le resta al esplendido clímax del filme.
De la mano con esto, otro de los fallos más notables lo es el área de los villanos. En este caso, me refiero más a la unidad de los Reavers, que aquí simplemente funcionan como picadillo para nuestros héroes, y el débil Dr. Rice, que cada vez que aparece es simplemente para funcionar como instrumento expositivo. El único que registra decentemente como villano es Holbrook como el agente Pierce.
Y uno que otro detalle pequeño (nitpicking) como las habilidades de edición y mezcla de video de la madre de X-23, que no afecta en grande el filme.
En fin…
Fácilmente la mejor película de Wolverine, Logan es violenta, viciosa y despiadada, pero con corazón y esperanza en su centro. La mejor película de los X-Men, nos presenta la versión definitiva del personaje que siempre hemos querido ver, donde la clasificación R sirve a la historia y era sin duda, necesaria. Logan funciona como un excelente filme tipo western, que se enfoca primordialmente en sus personajes y relaciones, al igual que como una emotiva y memorable despedida para Hugh Jackman y su adorado superhéroe.